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El texto de Lorena Rivera, escrito el 28 de Enero de 2025, analiza el impacto devastador de los fenómenos climáticos extremos en la educación de niños, niñas y adolescentes a nivel mundial, con un enfoque particular en México. Se basa en datos de Unicef, Inegi, Save the Children, el Servicio Meteorológico Nacional y la UNAM.

242 millones de estudiantes en 85 países sufrieron interrupciones escolares debido a eventos climáticos extremos en 2024.

Resumen

• El cambio climático está interrumpiendo la educación de 242 millones de estudiantes a nivel mundial (preescolar a secundaria) en 85 países durante 2024, según un informe de Unicef.
• Uno de cada siete estudiantes sufrió interrupciones escolares por riesgos climáticos.
• 23 naciones experimentaron múltiples cierres de escuelas a nivel nacional, y al menos 20 países tuvieron interrupciones a nivel nacional.
• El 74% de los estudiantes afectados se encuentran en países de ingresos bajos y medios bajos, con un alto puntaje en el Índice de Riesgo Climático Infantil (CCRI).
• México tiene un nivel alto (5.9) en el CCRI, y 13,100,000 estudiantes mexicanos fueron afectados, principalmente por olas de calor. Esto representa casi un tercio de la población infantil de México (38.2 millones según el Inegi en 2020).
• Las olas de calor fueron el peligro climático más importante a nivel global, afectando a 171 millones de estudiantes.
• En México, las olas de calor de 2024 superaron récords históricos, llegando a casi 50 grados centígrados en algunos estados. La Secretaría de Educación Pública modificó horarios de clases y en algunos casos se implementaron clases en línea.
• El huracán John en Guerrero impactó a más de medio millón de personas, incluyendo 200,000 niños, niñas y adolescentes, según Save the Children.
• Los niños desplazados enfrentan barreras adicionales para regresar a la escuela, incluyendo pérdida de materiales, estrés postraumático y desnutrición.
• Unicef recomienda invertir en sistemas educativos resilientes al clima.
• Save the Children advierte sobre los riesgos para la salud de los niños expuestos al calor extremo, incluyendo enfermedades respiratorias y renales.
• El Servicio Meteorológico Nacional prevé una nueva ola de calor para finales de marzo o principios de abril de 2025. Investigadores de la UNAM predicen que 2025 podría ser uno de los años más calurosos de los últimos cinco.

Conclusión

• Los fenómenos climáticos extremos representan una amenaza significativa para la educación de niños, niñas y adolescentes a nivel mundial.
• Se necesita una inversión urgente en sistemas educativos resilientes al clima para mitigar los impactos del cambio climático en la educación.
• La falta de acción gubernamental en la mitigación y adaptación a la crisis climática agrava la situación.
• La salud de los niños se ve seriamente comprometida por el calor extremo, afectando su capacidad de aprendizaje.
• Se requiere una respuesta coordinada a nivel global para proteger a los niños de los impactos del cambio climático.