El texto de Macario Schettino, escrito el 11 de septiembre de 2024, es una crítica mordaz al estado actual de México. El autor describe un país en decadencia, víctima de un gobierno autoritario y corrupto que ha erosionado las instituciones democráticas y ha sumido a la nación en un estado de crisis.
Resumen
Schettino denuncia el deterioro del país, atribuyéndolo a un gobierno criminal encabezado por un "desquiciado" que ha permitido el crecimiento del crimen organizado, ha abandonado a los mexicanos durante la pandemia, ha destruido el sistema de salud, ha cancelado programas de apoyo social, ha vulnerado las finanzas públicas y ha eliminado la posibilidad de un debate democrático.
El autor compara la situación actual con la hegemonía del PRI en el siglo XX, pero argumenta que la situación actual es mucho peor. A diferencia del pasado, el gobierno actual no se caracteriza por la disciplina, sino por la abyección, y no hay un sistema de contrapesos que modere al presidente.
Schettino cita a Pascal Beltrán del Río para comparar la situación actual con el régimen de Santa Anna, y argumenta que el país ha retrocedido a una época de caudillismo populista e irresponsable.
El autor describe la reciente reforma impulsada por el gobierno como un ejemplo de la falta de transparencia y la búsqueda de poder por parte del presidente.
Schettino critica la falta de voluntad de los mexicanos para luchar por un futuro mejor, y argumenta que la sociedad ha sido corrompida por la búsqueda del beneficio personal y la falta de compromiso con el bien común.
El autor concluye con una nota de esperanza, expresando su deseo de que el mes de septiembre sea un punto de inflexión para la construcción de un futuro mejor, pero advierte que la violencia es un riesgo real.
Conclusión
El texto de Macario Schettino es un llamado a la acción para los mexicanos. El autor reconoce la gravedad de la situación, pero también expresa su esperanza de que la sociedad pueda superar la crisis actual y construir un futuro más justo y democrático. La crítica de Schettino es contundente, pero también es un llamado a la reflexión y a la acción.
