Rank Columnas | Mail o Telegram

El texto de Andrés Clariond Rangel, publicado el 10 de abril de 2025 en REFORMA, reflexiona sobre la creciente tendencia a convertir a los políticos en celebridades y las consecuencias negativas que esto puede tener en su desempeño y en la sociedad. El autor critica la exposición mediática de figuras públicas y cómo esto puede afectar su salud mental y su capacidad para tomar decisiones racionales. También cuestiona la reforma judicial impulsada por López Obrador, que considera que politiza aún más el sistema judicial.

El autor critica la reforma judicial impulsada por López Obrador, que considera que politiza aún más el sistema judicial.

Resumen

• El autor critica a la primera dama de Nuevo León, Marianis Perrón, por quejarse de la atención mediática hacia su hija Mariel, cuando ella misma la expone constantemente en redes sociales.
• Se cuestiona si la fama y la atención mediática benefician a los políticos en su desempeño, argumentando que un servidor público debería ser valorado por sus habilidades y no por su imagen.
• Se señala que los políticos en México son asediados por la población, lo que puede generar una necesidad de atención constante y afectar su salud mental.
• Se menciona el caso de Donald Trump como ejemplo de un líder cuyas decisiones pueden estar influenciadas por sus fobias y problemas personales.
• Se critica la reforma judicial impulsada por López Obrador, que obliga a los aspirantes a jueces y magistrados a participar en campañas políticas mediáticas, lo que considera que degrada el sistema judicial.
• Se cuestiona la calidad de los candidatos a jueces y magistrados que participan en el "circo" mediático, y se teme que los perfiles más capacitados se alejen del proceso.
• Se pregunta hasta dónde llegará la politización y el espectáculo en otros ámbitos de la administración pública, como la salud, la educación y el ejército.

Conclusión

• El autor advierte sobre los peligros de convertir a los políticos en celebridades y de politizar el sistema judicial.
• Se argumenta que es importante proteger la salud mental de los líderes y garantizar que sus decisiones se basen en criterios racionales y no en impulsos personales.
• Se expresa preocupación por la degradación de las instituciones públicas y la pérdida de calidad en los perfiles de los servidores públicos.