Este texto de Alejo Sánchez Cano, escrito el 19 de diciembre de 2024, critica duramente las acciones del gobierno de la 4T en México, acusándolo de abuso de poder, corrupción y falta de transparencia. Se centra en la manipulación de procesos de selección para puestos clave y el desvío de recursos públicos.
Resumen:
Se denuncia la imposición de Bertha Alcalde como fiscal general de Justicia de la Ciudad de México (CDMX), a pesar de la existencia de candidatos más cualificados, siguiendo órdenes de Macuspana.
Se critica la manipulación en la selección de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), con la designación de Piedra.
Se menciona la eliminación de organismos autónomos y la reasignación de sus funciones a secretarías de Estado, debilitando los contrapesos al poder ejecutivo.
Se señala el control del gobierno sobre el Congreso, el INE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, para impulsar una agenda política que favorece la autocracia.
Se critica la falta de negociación justa con Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos.
Se describe el desvío de 2.2 billones de pesos del Infonavit, afectando a 20 millones de trabajadores.
Se menciona la reducción de servicios sociales para adultos mayores, a pesar de recibir una pensión.
Se plantea la preocupación sobre el futuro, cuando se agoten las fuentes de financiamiento del gobierno.
Se mencionan a Elena Valero Manzano y Ulrich Richter Morales como candidatos más cualificados que Bertha Alcalde.
Se utiliza la frase "¡Atásquense que hay lodo!" para describir la voracidad del gobierno por el poder y los recursos.
Conclusión:
El texto presenta una visión crítica y pesimista sobre el futuro de México bajo el gobierno de la 4T.
Se alerta sobre la concentración de poder en el Ejecutivo y la falta de contrapesos democráticos.
Se denuncia la corrupción y el desvío de recursos públicos como prácticas sistemáticas.
Se deja abierta la pregunta sobre la sostenibilidad del modelo económico actual y la posibilidad de que el gobierno recurra a otras fuentes de financiamiento, como las reservas internacionales o las Afores.
