Este texto de Alfredo Jalife-Rahme, publicado el 18 de diciembre de 2024, analiza la situación en Siria tras la aparente caída de Bashar al Asad, describiendo una Siria balcanizada bajo la influencia de Israel y Turquía. El autor presenta una perspectiva crítica sobre la intervención extranjera y las consecuencias para la estabilidad regional.
Resumen:
Caída de Bashar al Asad: El texto describe la situación de Bashar al Asad (BaA) como una caída en desgracia, abandonando a sus aliados Rusia, Irán y Hezbollah para acercarse a las Petromonarquías del Golfo Pérsico. Esto llevó a que Moscú y Teherán lo abandonaran.
Balcanización de Siria: Se describe la fragmentación de Siria en varias zonas de influencia: una zona controlada por los kurdos con apoyo de EE.UU. e Israel, territorios bajo control turco, y el dominio de grupos yihadistas como HTS (liderado por al-Jolani) con el apoyo de Turquía, EE.UU. (CIA/Pentágono) e Israel.
Posible división territorial: Se menciona la posibilidad de la creación de varios estados en Siria: un estado alauita con protección rusa, Druzistán bajo protección israelí, un estado kurdo (Rojova) bajo protección estadounidense, un estado sunita en Alepo bajo protección turca, y un estado sunita en Damasco bajo protección de Arabia Saudita (AS).
Intervención extranjera: Se destaca la intervención de potencias extranjeras como EE.UU., Israel, Turquía y Rusia, sus intereses en la región y su papel en la desestabilización de Siria. Se menciona el bombardeo israelí sobre el ejército sirio.
Financiamiento del terrorismo: Se plantea la pregunta de quién proveerá armas a los grupos yihadistas, implicando a Turquía, EE.UU. e Israel. Se cita el libro de Max Blumenthal, "La Gestión del Salvajismo", para argumentar que EE.UU. ha alimentado el ascenso de Al Qaeda/ISIS.
Reajuste de RIC: Se menciona el reajuste de la alianza RIC (Rusia/India/China) con la visita de Medvedev a Xi y de Rajnath Singh a Putin.
Conclusión:
El texto presenta un panorama sombrío para el futuro de Siria, con una alta probabilidad de una balcanización del país y una continua inestabilidad.
La intervención de potencias extranjeras se presenta como un factor clave en la crisis siria, con intereses geopolíticos y económicos que exacerban el conflicto.
Se sugiere una estrategia de desestabilización regional orquestada, posiblemente siguiendo el "esquema Brzezinski", para afectar a RIC.
El futuro de Siria se presenta incierto, con un largo camino de desestabilización por delante.