El texto analiza la Evaluación Integral del Derecho a la Salud 2023-2024, realizada por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), que revela la precaria situación del sistema de salud en México.
Resumen
El gasto de bolsillo en salud en México es del 42.1%, el doble del 20% recomendado por la Organización Panamericana de la Salud para evitar gastos catastróficos.
El porcentaje de la población que incurre en gastos catastróficos se duplicó entre 2018 y 2020, pasando de 2.4% a 4.4%.
La población con carencia de acceso a servicios de salud aumentó de 20.1 millones a 50.4 millones entre 2018 y 2022.
El Coneval identifica tres grandes retos estructurales:
Un sistema público de salud segmentado y fragmentado, con la proliferación de servicios privados y la coexistencia de diferentes instituciones (IMSS, ISSSTE, Sedena, Marina, Pemex, etc.).
Baja inversión en salud y asignación desigual, con entidades del sur sureste del país recibiendo menos financiamiento.
Calidad deficiente en la atención y los servicios de salud, con falta de atención médica equitativa, oportuna, segura y efectiva.
El Coneval propone las siguientes recomendaciones:
Definir un paquete homologado de servicios para todas las instituciones, incluyendo padecimientos de alto costo y baja incidencia y padecimientos prevenibles.
Establecer un fondo o subfondo nacional de salud para garantizar el financiamiento de servicios estratégicos.
Aumentar y asignar eficientemente la inversión pública en salud para mejorar la capacidad resolutiva de las unidades médicas.
Desarrollar personal de salud disponible en zonas rurales.
Conclusión
La evaluación del Coneval evidencia la necesidad urgente de una reconfiguración del sistema de salud en México, con el objetivo de garantizar el derecho a la salud para todos los ciudadanos. Se requiere una mayor inversión, una mejor coordinación entre instituciones y una atención de calidad para superar los desafíos actuales y mejorar la salud de la población.
